Dos aragoneses competirán en el IX Campeonato de España para Podenco Andaluz, Maneto y Orito

Información publicada originalmente en el suplemento 'Caza en Aragón' de diciembre de 2023.
https://www.farcaza.es/noticias/ya-disponible-la-revista-'caza-en-aragon'-de-diciembre-de-2023

6 de diciembre de 2023. Ángel Samper, consejero de Agricultura del Gobierno de Aragón, expone en esta entrevista las grandes líneas que seguirá su departamento en materia de caza, actividad que entiende fundamental para la conservación, la biodiversidad y el desarrollo y futuro del mundo rural.

La Consejería de Agricultura ha creado, por primera vez en nuestra administración autonómica, la dirección general de Caza y Pesca, una decisión bien acogida por cazadores y pescadores. ¿Qué ha llevado al consejero y al actual Gobierno a impulsar esta medida novedosa?

En Aragón, existen unos 50.000 cazadores y 56.000 pescadores, la creación de la Dirección General de Caza y Pesca es una medida pionera en Aragón que nace de la convicción de que la caza y la pesca son actividades tradicionales, sostenibles y necesarias para el equilibrio del medio ambiente y el desarrollo socioeconómico del mundo rural. La caza es una actividad que cumple una función fundamental en el control de las poblaciones de animales silvestres. Es también una actividad económica importante para el mundo rural. Genera empleo, dinamiza el turismo y contribuye a la conservación del medio ambiente. Estamos convencidos de que esta nueva dirección general será un instrumento eficaz para lograr estos objetivos y contribuir al desarrollo sostenible del mundo rural.

Pasados ya unos meses desde la conformación del gobierno autonómico de Aragón, ¿puede avanzar las grandes líneas por las que se dirigirá su departamento en materia de caza?

La creación de la Dirección General de Caza y Pesca es una apuesta por el futuro del mundo rural. Esta nueva dirección general tendrá, entre otros objetivos, garantizar el equilibrio de las poblaciones de especies cinegéticas mediante su aprovechamiento sostenible; promover el relevo generacional en la caza y la pesca; convertir la caza y la pesca en un auténtico motor de desarrollo socioeconómico del mundo rural aragonés y cambiar la actual percepción negativa que, sobre la caza, tiene la población que vive en las ciudades. Otro aspecto muy importante consistirá en trabajar para que agricultores, ganaderos y cazadores se apoyen mutuamente.

Aunque usted no está afiliado a Vox, se sobreentiende que participa de las políticas de esta formación, en particular en cuanto toca a la llamada ‘España vaciada’ y a la defensa del medio rural. ¿Qué papel cree que puede jugar en este sentido la caza?

La caza puede jugar un papel importante como motor de desarrollo socioeconómico en la España vaciada y la defensa del medio rural, ya que contribuye al aumento de las rentas agrarias al disminuir los daños a la agricultura producidos por especies cinegéticas y aumenta la seguridad vial fundamentalmente en nuestro entorno rural. Por otro lado, genera empleo y dinamiza la economía local en sectores como la hostelería, el turismo o las empresas de guías de caza, y promueve la llegada de fondos a los ayuntamientos a través de la venta de permisos de caza. En la España vaciada, la caza puede ser una actividad clave para frenar la despoblación y el abandono rural.

La defensa de la caza y del medio rural y la oposición a ciertas políticas del gobierno central, como la denominada Ley de bienestar animal, originó en marzo de 2022 una de las mayores manifestaciones dadas en Madrid.

Permítame que manifieste mi opinión sobre la manifestación que usted cita y en la que yo personalmente participé. Las causas que se defendían en la manifestación del 20 de marzo de 2022 son justas y completamente necesarias para el mantenimiento de una vida digna de las personas que trabajan en el campo aragonés. El despoblamiento rural es un problema grave que afecta a todo el país, pero que es especialmente acuciante en Aragón. La legislación ambiental actual está demasiado centrada en la protección de los animales silvestres y no tiene en cuenta las necesidades del mundo rural. Espero que la manifestación del 20 de marzo de 2022 haya servido para que las administraciones públicas tomen conciencia de la situación del mundo rural y adopten medidas para solucionar sus problemas.

En una reciente entrevista concedida a este periódico por el director general de Caza,
https://www.farcaza.es/noticias/entrevista-con-jorge-valero-nuevo-director-general-de-caza-y-pesca-del-gobierno-de-aragon

Jorge Valero, se indicó que la caza en Aragón posee una extraordinaria capacidad como motor de economía y también de turismo, superando, incluso al sector de la nieve. ¿Podría concretar en cifras estas potencialidades de la caza?

El Gobierno de Aragón es muy consciente del gran papel que la caza juega en el desarrollo del medio rural aragonés. El estudio más reciente realizado para conocer la contribución de la actividad cinegética al Producto Interior Bruto de Aragón es el encargado por la Federación Aragonesa de Caza a la empresa Deloitte Consulting denominado 'Impacto económico y análisis de gasto cinegético en la Comunidad de Aragón'. Dicho estudio estimó que, en 2015, las actividades cinegéticas en Aragón contribuyeron con 258.375.436,4 € al intercambio de flujos monetarios en Aragón, cifra que actualizada con el IPC a 2023 se eleva 309.792.148,30 €. Por otro lado, contribuyó al mantenimiento de unos 8.500 empleos en Aragón, con unos retornos fiscales en torno a los 56 millones de euros (67,2 M€ actualizados a 2023). En total, podemos hablar de un aporte al PIB aragonés de 377 millones de euros anuales.

Aragón es para la caza mayor una Comunidad privilegiada, por la variedad de especies y por las notables poblaciones con las que cuenta: jabalí, ciervo, sarrio, corzo, cabra hispánica… ¿Hasta dónde se pretende trasladar el gancho que pueda generar la caza de estas especies?

El Gobierno de Aragón está comprometido con la promoción de la caza en Aragón como una actividad sostenible y respetuosa con el medio ambiente. Para ello, llevaremos a cabo una serie de medidas, entre las que podemos destacar la participación en ferias de caza locales y también nacionales como Cinegética en el IFEMA, y el desarrollo de redes sociales que promuevan la caza y la pesca en Aragón. También abordaremos la colaboración con las asociaciones de cazadores para promover la caza sostenible y responsable. Con estas medidas, queremos trasladar la calidad única de la caza en Aragón a un público más amplio, tanto dentro como fuera de la Comunidad. Queremos que Aragón sea un destino de referencia para los cazadores de todo el mundo.

Cuando se habla de caza mayor vinculada a términos como economía o turismo, hay cierta tendencia a pensar en una caza practicada por élites, por clases adineradas.

En Aragón hay cabida para distintos tipos de cazadores. Siempre defenderemos la caza social, que es el modelo implantado en nuestra comunidad desde hace muchos años. También seguiremos apoyando el concepto de la ‘Caza Natural’ que nos da la práctica ausencia en Aragón de cercados de caza. Dicho lo anterior, también hay cabida para cazadores que paguen altos precios por cazar ejemplares concretos, dado que algunos de los mejores trofeos que se pueden cazar en España habitan en las sierras y montes de nuestra Comunidad Autónoma.

Conoce usted bien los daños causados por la superpoblación de conejo en cereales de invierno, viñedos o infraestructuras. ¿Qué cabe esperar a este respecto bajo su gestión en la Consejería?

La sobrepoblación del conejo en el Valle del Ebro y en otros municipios cercanos, parece asociada a la aparición de resistencia del conejo a dos enfermedades víricas, la mixomatosis y la neumonía hemorrágica vírica, y a la presencia de zonas refugio como son las infraestructuras lineales dotadas de vallado y terraplén (vías de autopistas, AVE y grandes infraestructuras hidráulicas).

Hoy por hoy, la caza intensiva del conejo se configura como uno de los mejores métodos de control de esta especie y, por tanto, de los daños agrícolas que provoca. No obstante, debe complementarse con medidas tales como la protección de frutales, la limpieza de márgenes para poder cazar con hurón y otras. En este sentido, en el próximo plan general de caza se va a impulsar aún más la figura del «cazador habilitado».

Usted, siendo responsable de Jóvenes Agricultores, se pronunció claramente en contra de la reintroducción y presencia del oso en el Pirineo...

Mi opinión no ha cambiado, pero la normativa medioambiental hay que cumplirla porque estamos en un estado de derecho que nos obliga a todos. Dentro de eso, desde este departamento vamos a intentar a que las afecciones del oso sean las menores posibles a ganaderos y cazadores.

Por mandato de las Cortes de Aragón, el gobierno autonómico está estudiando la posibilidad de reintroducir el lince en nuestros hábitats, en la sierra de Alcubierre y en el Campo de Cariñena y Planas de María, generando de esta manera la lógica inquietud entre los cazadores. ¿Cómo observa usted esta cuestión?

Por desgracia, la ganadería extensiva aragonesa está tan o más en peligro de extinción que el lince. Mientras trabajamos por solucionar el futuro de la ganadería extensiva no entendemos que al mismo tiempo se liberen depredadores que puedan afectar al manejo y viabilidad económica de nuestra cabaña extensiva. Recientemente, la Plataforma para la Defensa de la Ganadería Extensiva en Aragón, que aglutina a todas las organizaciones agrarias, cooperativas, ADS y restos de agentes presentes en el sector de ganadería extensiva aragonesa, se posicionó en contra de la reintroducción del lince y, lógicamente, desde el departamento de Agricultura vamos a estar a su lado oponiéndonos a la reintroducción de este depredador.

Hasta el próximo 11 de diciembre está en periodo de información pública el plan general de caza de la próxima temporada, para la 2024/2025. ¿Qué novedades subrayaría usted, si es que las hay o habrá?

El plan está en tramitación, por lo que su redacción puede variar a lo largo de los próximos meses. En la versión que se ha sometido al trámite de información pública aparecen entre otras novedades las siguientes: se establece que durante la caza se podrán emplear dispositivos térmicos que no estén montados sobre el arma; se modifica el periodo hábil de la caza del corzo de tal forma que las fechas de caza de diferentes temporadas no se solapen; se permite la caza del corzo hembra durante todo el año en municipios en los que esta especie provoca graves daños agrícolas en los frutales; se señala que, para los hurones utilizados en la caza en Aragón, no existirá obligación de registrarlos ante la administración aragonesa ni de dotarles de un microchip de identificación; se establece que las señales de aviso de batidas podrán colocarse desde el día anterior a la celebración de la batida e indicarán la fecha y las horas de inicio y finalización de la misma; se ha considerado necesario dictar una serie de normas que permitan el necesario control poblacional del jabalí mediante batidas de caza en zonas de caza con presencia de oso; se señala que, para tasar los daños agrícolas producidos por especies cinegéticas, la persona que perite deberá seguir la metodología establecida en la Orden PRE/632/2003, de 14 de marzo, por la que se aprueba la Norma general de peritación de los daños ocasionados sobre las producciones agrícolas, amparados por el seguro agrario combinado....

Una fluida y productiva relación entre el Gobierno de Aragón y la Federación Aragonesa de Caza es uno de los aspectos que ha caracterizado a este deporte en los últimos años en nuestra Comunidad. ¿Cómo entiende usted que deba ser en adelante esta relación?

La buena relación entre el Gobierno de Aragón y la Federación Aragonesa de Caza ha sido clave para el desarrollo de la normativa y la práctica de la caza en nuestra Comunidad. Creo que esta relación debe seguir basándose en la confianza mutua y la colaboración total. Es importante que trabajemos juntas para lograr los objetivos comunes, como garantizar el equilibrio de las poblaciones de especies cinegéticas; promover el relevo generacional en la caza; y que la caza estimule, en la medida de lo posible, el tejido socioeconómico del mundo rural.